domingo, 14 de junio de 2009

la Sangre canta???



“El canto de la sangre”

Emmett Pov

Cuando conocí a Rosalie ella ya era vampira, nos fuimos conociendo, poco a poco me enamoré de ella. Su sangre nunca "cantó" para mí, dah... no sé porque Edward dice eso de la de Bella, es tan bobo, o sea, ¿Cuándo alguien ha escuchado que la sangre canta? Pues yo nunca y soy un vampiro, con todos mis sentidos muy bien desarrollados, soy fuerte, además de hermoso y ¡Soy lo máximo! a parte me aman, ¿O no? Bueno, en fin, creo que no hablábamos de mi hermosa perfección. Igual es ridículo, Bella huele genial, pero nunca he escuchado a su sangre cantar, ¡La sangre no canta!, en fin, llevo muchos años viviendo con los Cullen, desde que Rosalie me salvó de aquel oso ¡Vaya oso! era gigante y fuerte, bueno, desde que ella me salvó he estado acostumbrado al amor en forma vampírica, Alice con Jasper, Esme con Carlisle y mi Rosalie, nuestro amor es muy diferente, no tenemos que estar cuidándonos por todo, no corremos riesgo al estar al lado de la persona que amamos, no tenemos que pensar en convertirlo o no, todo es muy diferente, y esa loquera de Edward, ¡Oh my God! está loco. ¿Cómo se enamora de Bella? Ella era humana. Me acordé de aquellas hermosas vampiresas que conocimos hace un tiempo, Andrea y Andreina, recuerdo eran sus nombres, son unas bellezas, le dije a Edward que una de ellas podría ser la indicada para él, además yo vi como lo miraban y él tampoco se quedaba muy atrás, pero no, el se empeñó en estar con Bella.

No tengo nada en contra de ella, es mi hermana y la quiero como tal, ¡pero no!, ella era humana.

"Emmett, deja de pensar esas cosas" me gritó Edward desde la sala, no sé cómo, pero mientras pensaba todo esto me olvide de que él podía escucharme.

"Cállate 'Don Escucha Sangre'. Solo tú puedes escuchar a la sangre cantar. ¿Es eso acaso otro don que tenías oculto, Edward?” - pensé.

"¿Es que eres idiota, Emmett Cullen?"

"El que escucha la sangre cantar eres tú y el idiota aquí soy yo, ¡Ja! Genial" - pensé de nuevo.

"Cállate Emmett, deja de perturbar mi velada"

"Tu velada con la dueña de la sangre que canta. Ja, ja, ja"

"Emmett, si no quieres que tengamos una pelea pronto, deja de molestar, mi paciencia tiene sus límites y hoy no está Jasper"

"Perdone usted 'Don Edward', si me quiere dejar de escuchar pues ¡Deja de leer mi mente!"

"Como si pudiera, por fin piensas algo y ¿me lo voy a perder? ¡Jajaja! Por favor Emmett, soy viejo pero a la moda y con lo nuevo"

"Jajajajajajajajajajajajajajajajaja, si tú estás a la moda yo soy aquaman"

"Ya Emmett, deja de fastidiar, mejor vete a mirar a Rosalie o algo"

"Deja ya de leer mi mente Edward Anthony Mason Cullen "

Dijo algo más, pero no le presté atención, de seguro él lo único que leía de mí mente era la letra de aquella canción que amaba:

Oh baby dont you know I suffer?

Oh baby can you hear me moan?

You caught me under false pretenses

How long before you let me go?

You set my soul alight

You set my soul alight

(You set my soul alight)

Glaciers melting in the dead of night

And the superstars sucked into the supermassive......

Supermassive Black hole…

En otra parte de la casa:

Edward PoV

"Emmett me saca de quicio, ¿Le hemos hecho algo acaso?" le dije a Bella, a la cual tenía entre mis brazos

"Pues en verdad no mi ángel, nada que le pudiera molestar" su voz tan dulce, tan angelical, ella seguía siendo mi marca personal de heroína, aunque ya la sangre que antes me cantaba no corriera por sus venas.

“Pues a pesar de todo sigo sin entender, siempre trato de llevar la fiesta en paz con él, pero es muy odioso”.

“Te estoy escuchando Edward” escuché a Emmett gritar desde arriba, obvio lo hizo para que Bella lo escuchara, yo lo podía hacer leyendo su mente.

“Si te molesta no escuches y ya, Emmett” le dije muy seriamente aunque él todo lo tomaba por otro lado.

“No me molesta, sigue, quiero saber si podré escuchar la sangre de Bells” apareció de repente en la sala.

“¡Si eres tonto Emmett!” dijo mi Bella tan hermosa como siempre.

“Pero ¿por qué? ¿Desde cuándo, Bella, dime, cuando empezó a cantar la sangre?” le decía con cara de confundido, yo solo esperaba la respuesta de mi amada.

“Desde que aparecí en la vida de Edward” dijo tan hermosa como siempre, así como ella me encantaba, así como yo la amaba. Volteó la cara hacía mi y le planté un beso apasionado.

“Ay si, ay si, ahora se me van a poner cursis, mejor me voy” No le hicimos caso y seguimos en nuestro beso. Emmett se fue alejando y cuando ya estaba en el segundo piso nos gritó:

“¡¡¡Edward!!! Cómprale una casa. Pero recuerda, le compras un micrófono a su sangre o algo para que te cante más a gusto”

Bella y yo nos empezamos a reír y luego nos dimos otro amoroso beso.

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