Era una mañana cualquiera en Forks, excepto por una cosa: el estúpido y maldito sol había decidido salir el peor día de todos (o por lo menos, eso es lo que pensaban los miembros mas jóvenes de la familia Cullen (Jóvenes, en teoría)) ya que esos días eran los exámenes finales.
Como cada día de sol, todos los miembros tuvieron que quedarse en casa para no ser descubiertos.
Carlisle estaba estudiando el caso de una paciente que padecía una grave enfermedad
Esme limpiaba y arreglaba la casa, cosa que solo hacia para combatir el aburrimiento, ya que no había una sola mota de polvo
Alice estaba vaciando su armario y probándose absolutamente toda la ropa que tenia, una buena forma de entretenerse, sobretodo si tienes 1435 vestidos 3245 camisetas, y 9234 pantalones y faldas…
Edward tocaba el piano, y estaba componiendo una canción para Bella, en la que intentaba decirle que era una patosa lo mas cariñosísimamente posible... aunque le resulto un poco difícil
- Ten cuidado mi amor... cuando te caes me estremezco... no por que sufras dolor... ¡¡¡sino por que la última vez te cargaste mi reproductor nuevvvvvvoooo!!!!- Después recapacito....- mejor quito lo de me estremezco.... que queda muy cursi, por lo demás está bien.
Rosalie estaba arreglando el jeep de Emmet.... que se había cargado al intentar atropellar a una pobre paloma, que al llegar al final del precipicio por el que era perseguida, hecho a volar, y el vampiro pensó que por batir las alas muy fuerte( que por cierto, el muy inútil lo intentó...) podría pillarla...
Jasper veía una película de la guerra, aunque en realidad no le prestaba mucha atención, mientras se entretenía pasándose una pelotita por sus pálidas manos.
Y Emmet.... Emmet... ¿que demonios intentaba hacer Emmet destrozando toda la cocina?
-¡¡¡¿Donde está mi bolsa de cacahuetes?!!!- mientras levantaba la nevera para mirar debajo
- ¿Tu que?- pregunto Jasper, que era el único que se encontraba cerca, (además de Esme, que al ver que Emmet levantaba la nevera limpió debajo de ella.
- ¡Mi bolsa de cacahuetes! ¡Alguien se los ha comido!- volvió a gritar él.
- Emmet… somos vampiros… solo ‘comemos’ sangre…. Además… ¿para que demonios quieres una bolsa de cacahuetes?- preguntó de nuevo Jasper, que se había levantado del sofá, y estaba en la cocina observando perplejo a su hermano- mira en tu cabeza, que al estar hueca puede que hayan decidido meterse dentro.- rió sarcásticamente.
-Déjame en paz- mientras apartaba a su hermano, y se ponía a gritar, mirando en todos los rincones de la casa- ¡¡Emmet júnior!! ¡¡Rosalita Catalina Ximena !! ¡¡ Maria Fernanda Agustina de las Mercedes!! ¡No os preocupéis, voy a encontraros!
-¿Pero que co…?- empezó a decir Jasper, pero en ese momento entró por la puerta Rosalie, al margen de la conversación, hasta que su ‘’gemelo’’ le dirigió la palabra.- ¡Rosalie, dile algo a tu novio que le ha puesto nombre a tres estúpidos cacahuetes, y encima los a perdido!
-No son estúpidos!- dijo Emmet, que había escuchado a su hermano desde la otra habitación, y había vuelto corriendo- ¡¡Son mis cacahuetitos!!- mientras ponía la mano derecha encima de donde se suponía que se tenía que encontrar su corazón, aunque en realidad, no podía sentirlo.
Miró a su hermano y a su novia a la cara, y al ver que ninguno de los dos movía un músculo, gritó:
- Reunión familiar!!- A pleno pulmón, para que hasta las ratas del sótano (si es que había, cosa que dudo…ya se las habrían comido… supongo xD) le escucharan.
A los pocos minutos, toda la familia Cullen se encontraba en el salón de la casa, pensando que en la reunión se daría algún tema importante, pero todos comprendieron que no era así, al ver como Emmet se levantaba del sofá, y se ponía delante de los demás.
-Hoy a sucedido un acontecimiento extraordinario que quería comentar con ustedes, señores concejales- dijo él, leyendo un papelito que tenía delante
-Emmet…- comenzó Esme- ¿Cuántas veces te he dicho que dejes de copiar los discursos de los presidentes?
-Perdón…- murmuró él a regañadientes- bueno, resumiendo… que alguien me ha robado mi paquete de cacahuetes, y si el culpable o culpabla- su padre intentó corregirle, pero el no se detuvo, y siguió hablando- no se presenta en cinco misisipis, me enfadare…y no os dejare de molestar ni una milésima de segundo hasta que mi Emmet júnior, mi Rosalita Catalina Ximena, y mi Maria Fernanda Agustina de las Mercedes vuelvan ha estar con su papi… yo.
-Emmet, cariño, eso es una tontería- dijo Esme.
- Un Missisipi- dijo él, sin prestar atención.
- Puede que te los hayas dejado en el coche.- le intentó tranquilizar Rosalie
-Dos Misisipis,- continuó de nuevo Emmet.
-Compraremos unos nuevos- le animó Alice, pero el seguía sin prestar atención.
-Tres Misisipis- A él nadie le convencería.
-Si no dejas de hacer el estúpido, cuando los encuentre te juro que los destrozo con el piano de Edward- respondió Jasper, intentando, en vano, serenar a su hermano
-Cuatro Misisipis.
-Emmet…- respondió al fin Carlisle, que era, aparentemente, el único al que aun le quedaba un poco de sensatez.- hijo… ¿y si te ayudamos entre todos a buscar tus estú… a tus queridos cacahuetes?
- ¡Esta bien!- respondió Emmet.- Nos separaremos por grupos, que are yo.
Todos se arrepintieron… pero no podían hacer nada.
- Carlisle y Alice los buscaran en el primer piso- mirándolos- Esme y Edward, en el segundo piso… Jasper y Rosalie en el bosque, y yo me quedare en la entrada, ha esperar que vuelvan.- mientras se ponía unas enormes gafas redondas, un montón de mantas encima, y una peluca blanca.
-¿Qué vas a hacer con todo eso?- pregunto Edward, sin saber si reír, llorar, o llorar de risa, por las pintas que llevaba Emmet.
- Voy a hacer ganchillo Joven, ¿o es que no lo ve?- Poniendo voz de anciana, y dirigiéndose al banquito que había en la entrada.
Todos decidieron hacerle caso, ya que cuando a Emmet se le pone algo entre ceja y ceja…no hay quien se lo quite ni a golpes.
Ya hacía una media hora que buscaban los dichosos cacahuetes de Emmet, pero seguían sin encontrarlos.
Carlisle y Alice, ahora estaban buscando por el salón, sin ningún resultado.
Esme y Edward decidieron probar suerte, con el cuarto de Emmet, pero ese sitio parecía un estercolero, y era imposible encontrar algo…
Por otra parte, Jasper, que paseaba con Rosalie por los bosques que se encontraban a los alrededores de la casa, se había quitado la camiseta, ya que al ser blanca no quería que se le ensuciara. Ambos iban caminando sin mirarse, y sin dirigirse la palabra, sin saber que hacer, ni a donde ir, ya que era técnicamente imposible que los cacahuetes hubieran cobrado vida, y se hubieran escapado.
Ya estaban bastante lejos de la casa, y Rosalie decidió sentarse en un claro del inmenso bosque, aunque no estaba cansada, y se apoyó en un enorme árbol centenario.
- ¿Qué haces?- le preguntó Jasper- debemos seguir buscando
-¿Enserio crees que encontraremos una bolsa de cacahuetes en el bosque?- dijo ella, incredula.
-tienes razon dijo el sentandose a lado de rosalie mientras se quitaba la camisa pues podria romperla y Alice lo mataria
ambos se quedaron en silencio un buen rato hasta que el rompio el silencio
-¿deberiamos regresar?, ella lo miro divertida sin poder quitar los ojos el perfecto cuerpo de el
entonces sacudio lacabeza sacando los malos pensamientos y asintio lentamente
ambos caminaron hacia la casa, entonces JAsper sonrio a rosalie y saco una bolsa con llos cacahuates de emmett
-¿donde? pregunto Rosalie incredule mirando a Jasper
-lo que uno hace por pasar tiempo con su hermana respondio Jasper sonriendo mientras besaba fugazmente a rosalie quein sequedo perpleja en medio del bosque....
viernes, 10 de julio de 2009
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