Helga POV
Cuando recobré el sentido me encontraba acostada en un sillón con los cuatro chicos sentados en el sillón frente al mío, mirándome con preocupación.
- ¿Dónde está Edward? – les pregunté.
- En casa de Bella – respondieron los cuatro en un susurro.
- Quiero que le hablen y le digan que lo quiero aquí en tres minutos – les dije cortantemente.
Alice tomó su celular y le marcó a Edward, habló tan rápido que me fue difícil entender lo que le había dicho.
Cuando terminó la llamada se sentó junto a Rosalie y la habitación se sumió en silencio, esperando a que Edward llegara, estos chicos me debían varias explicaciones.
No pasaron ni tres minutos para que Edward entrara por la puerta de la casa, esto era inconcebible. Edward no dijo nada y se sentó junto a Emmett.
- Quiero una explicación – les dije firmemente – en la mañana aseguraron sentirse enfermos y cuando los vengo a ver están…están…me siento muy decepcionada de ustedes, vergüenza les debería de dar, cometiendo incesto en su propia casa…
- Técnicamente no es incesto Helga, dado el hecho de que somos adoptados, no corre la misma sangre por nuestras venas – Edward defendió a sus hermanos.
- Aún así Edward, que inmoral de su parte, no es correcto, un caballero jamás le haría eso a una dama, aunque no fuera su hermana, y ustedes chicas, deberían de tener más decoro, ese acto se debe de hacer cuando una ya tiene una pareja formal y están unidos en sagrado matrimonio - los cinco querían reírse sin embargo contuvieron la risa – Jasper, Emmett, yo sé que Rosalie y Alice no son sus hermanas de sangre, pero lo que hicieron es un acto completamente fuera de las reglas de la sociedad, es completamente inmoral y ojalá Dios los perdone por lo que han hecho. – Los dos bajaron la cabeza pero me pude dar cuenta que una sonrisa curvaba sus labios – En cuanto a Rosalie y Alice, me siento muy decepcionada de ambas, ustedes dos son unas señoritas, son muy jóvenes y aún no conocen lo peligroso que es mantener una relación con un muchacho y menos con su “hermano” de por sí encuentro eso de que las jóvenes pierdan su virginidad antes de casarse un acto irresponsable e inmoral, pero esto es peor, es un pecado. – las dos se mostraban impasibles, pero podía advertir su diversión en sus ojos ¿Dorados? – Sin mencionar que es imperdonable que lo hagan bajo el mismo techo donde los señores Cullen los han acogido y ustedes miren como se los pagan, acostándose con sus hermanos. Me pregunto si ellos están enterados de sus actos amorosos y si ellos están de acuerdo en eso pues ya tendrán también otra manera de pensar, pero mientras yo esté aquí no me queda opción mas que dormir con las chicas para asegurarme de que esta situación no vuelva a ocurrir.
Emmett POV
Los cinco seguimos sentados ahí sin movernos, aguantando la risa y viendo como Helga nos sermoneaba.
- En cuanto a ti Edward, en ningún momento me pediste permiso para ir a casa de Bella y eso también lo encuentro de muy mal gusto, ir a casa de tu novia sin permiso, tengo entendido que Bella es hija del jefe de policía – Helga comenzó su sermón nuevamente, esta vez contra él – estar solos en su casa sin vigilancia no es correcto, ¿Qué diría el jefe Swan si se enterara que yo, permití que fueras a visitar a Bella? Es completamente incorrecto, no es propio de un caballero.
Edward no dijo nada, simplemente se quedó impasible. Helga estaba dándonos un sermón que en la vida se nos olvidaría… de lo divertido que fue.
- Por otro lado quiero decirles que fingir su enfermedad me tiene muy molesta, perdieron un día de clase y eso se los voy a decir a sus padres, ellos que les están proporcionando educación para que en un futuro sean personas exitosas y ustedes que lo desaprovechan de esta manera, que decepción muchachos – Ahora Helga nos sermoneaba de la escuela ¿es que esto no iba a terminar nunca?
- Pero en serio estábamos enfermos – protestó Alice
- Entonces si estaban tan enfermos ¿Rosalie Edward me podrían explicar a dónde fueron? – Helga miró a ambos fijamente.
- Fuimos…al jardín – respondió Rosalie.
- Claro, al jardín, por eso se llevaron el Jeep de Emmett ¿no es así? Para ir al jardín tienen que irse en el Jeep – Helga me sorprendió, era más inteligente de lo que me esperaba – sin mencionar que tomaron las llaves de éste sin permiso, además como pueden ser tan irrespetuosos con los objetos personales de su hermano
- A mí no me molesta Helga, los coches nos los compraron nuestros padres y nosotros no tenemos ningún problema en prestarlos entre nosotros, por eso somos hermanos – le dije y los otros cuatro asintieron
- Pero se les olvida que yo guardé las llaves de los coches para que no hubiera accidentes, no me pidieron permiso para tomar las llaves y se fueron sin avisarme o decirme nada, eso no fue muy responsable de su parte, les pudo haber pasado algo y ¿quién hubiera sido responsable? Yo. Que inconscientes fueron – Al parecer el sermón de Helga había terminado, ¡¡por fin!!
Pero ninguno de nosotros esperaba lo que venía a continuación.
- Finalmente ¿Alguien podría decirme en que pandilla están metidos?
Alice POV
¡¿Pandilla?! ¿En qué estaba pensando Helga? Voltee a ver a mis hermanos y sin poder evitarlo, los cinco estallamos en carcajadas. Pero al parecer Helga se lo tomó muy en serio lo de la pandilla.
- Yo no le veo la gracia – nos dijo seriamente por lo que los cinco intentamos para de reír
- ¿Helga a qué te refieres con lo de “Pandilla”?- preguntó Jasper entre risas
- Ustedes cinco forman parte de una pandilla, estoy segura – Helga hablaba en serio, voltee a ver a Edward y él se veía más divertido que nunca
“¿Edward qué sucede?” le pregunté mentalmente, él se limitó a alzar los hombros mientras sonreía inocentemente.
Intentaba visualizar el por qué decía que estábamos en una pandilla, pero lo único que pude ver fue que el teléfono sonaba.
- No estamos en ninguna pandilla- dijo Rosalie divertida
- ¿Entonces por qué usan pupilentes negros? – nos preguntó y todos volvimos a reír, pero solo que esta vez era una risita nerviosa por parte de todos.
La verdad no esperábamos que se diera cuenta del cambio que experimentaban nuestros ojos si no nos alimentábamos.
- Es que…nosotros…nosotros - Edward no sabía que decir y al parecer ninguno de nosotros podía explicar el por qué usábamos “pupilentes”
- Es que fue por una apuesta que hicimos entre nosotros – Emmett se inventó un pretexto que a mí se me hizo completamente estúpido.
- Explícame esa apuesta Emmett – pidió Helga.
- Es que nosotros jugamos béisbol, y la vez pasada que jugamos apostamos que el grupo perdedor se pondría los “pupilentes negros” pero como fue empate nuestros padres dijeron que los cinco tendríamos que cumplir y nos compraron a los cinco los pupilentes – explicó Emmett y se podría decir que era algo coherente.
- Ah, y ¿por qué solo los usaron ayer? – nos preguntó
- La verdad es que ya cumplimos con la apuesta pero, pues no queremos que el gasto de mis padres se vaya a la basura, entonces los usamos constantemente para que valga la pena – Jasper respondió esta vez.
Helga se quedó callada, meditando lo que habíamos dicho. Ninguno de nosotros hizo o dijo nada sino que esperamos a que ella dijera otra cosa para que luego nosotros pudiéramos irnos a nuestras habitaciones.
- Creo, que no está bien que usen esos pupilentes chicos, ustedes son como son y no es necesario que cambien eso, es una falta de respeto hacia su cuerpo…
“¡¡no otro sermón!!” pensé y vi la misma expresión en la cara de mis hermanos.
- … ustedes deben de amarse, amar su cuerpo tal y como es, las perforaciones, los tatuajes y esos pupilentes que ustedes usan, degradan su cuerpo hacen que se vean como vagabundos, gente corriente y ustedes son una familia de gente decente así que no lo hagan, ustedes son buenas personas – ¡¡por fin terminó!!
Cuando mis hermanos y yo volteamos a ver el reloj ya habían pasado dos horas, ¡¡dos horas de interminable sermón!! Finalmente nos dejó subirnos un rato mientras preparaba la cena.
Rosalie POV
Cuando nos dijo que podíamos subir, los cinco salimos disparados a la habitación de Edward, todos estábamos apunto de estallar, no sabíamos si de risa…o de frustración. Ese sermón nos había dejado a todos exhaustos, aburridos y divertidos.
Todos nos sentamos en los lugares de siempre y nos volteamos a ver, cuando nuestras miradas se cruzaron, los cinco rompimos a carcajadas. No podíamos parar una vez que hubimos comenzado, y menos por Jasper. En ese momento recordé lo que hizo y al parecer Edward leyó mis pensamientos y también dejó de reír.
Jasper se dio cuenta de que nosotros dos íbamos a matarlo y nos miró con preocupación, pero Alice y Emmett seguían riendo. Antes de que Edward y yo pudiéramos abalanzarnos sobre Jasper, Helga gritó
- Jasper, Edward, Emmett bajen por favor – les pidió a mis hermanos y el primero en salir fue Jasper, seguido inmediatamente por Edward.
- Los van a poner a cocinar – me dijo Alice entre risas – no los quiere cerca de nosotras.
- Me lo imagino – dije yo riendo.
Después de un rato nos llamaron a cenar, bajamos y todos ya estaban sentados, Alice y yo nos sentamos con Helga porque al parecer ya tampoco nos dejaría estar juntos ni en la mesa.
- Señor bendice estos alimentos, te damos las gracias por tenerlos en la mesa – Helga rezó por todos
- Amén.
Comenzamos a “comer” y todo transcurrió con tranquilidad por parte de nosotros. Al terminar la cena Alice y yo nos quedamos a recoger la mesa y lavar los platos para que los chicos subieran la cama de Helga a la habitación de Alice.
Cuando terminamos, nosotras también subimos, la cama de Helga no dejaba que la puerta se abriera por completo, de manera que no podríamos salir sin que ella lo notara.
- Adentro Chicas – nos ordenó Helga – chicos buenas noches
- Buenas noches – dijeron los tres con una sonrisa enorme
¡¡Los muy malditos iban a poder hacer lo que quisieran durante la noche mientras que nosotras no podríamos hacer nada!!
- Buenas noches hermanitas – los tres nos dieron un beso en la mejilla y se metieron a sus habitaciones sonriendo maliciosos.
Alice y yo nos pusimos las pijamas en el baño, al salir Helga esperó a que nos metiéramos a la cama para poder apagar las luces.
Esa noche fue de lo más larga, Alice y yo nos limitamos a estar acostadas por unas diez horas.
Cuando por fin amaneció Helga se fue a su habitación para darse un baño y arreglarse mientras nosotras hacíamos lo mismo. Cuando oímos la regadera de su habitación, las dos nos fuimos a mi habitación.
Al llegar Jasper abrazó a Alice tiernamente mientras le decía que la había extrañado mientras que Emmett se vino sobre mí, me pegó a la pared y me besó con toda pasión.
Después de habernos quedado así un buen rato, oímos un grito de Helga, los cinco bajamos a ver que ocurría vimos a Helga…con su chillante cabello rosa.
jueves, 25 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario